Ya hemos adelantado que la amalgama es un material que no respeta la estética del paciente y ello se debe a que estamos hablando de una aleación de metales que nos ofrecen un color similar a la plata y, como es lógico, dista mucho del color del diente natural y por ello afeará la sonrisa de aquella persona que luzca este tipo de empastes. Sin embargo este no es el único inconveniente de la amalgama dado que está demostrado que puede llegar a ser tóxico debido a que cuenta con mercurio entre sus componentes, siendo esta otra de las razones por las cuales estamos ante un material en desuso.(unidad dentales)
Hoy por hoy la resina compuesta es la opción más común y habitual en un empaste, mejorando ampliamente las prestaciones que nos propone la amalgama, a pesar de ello no debemos olvidar que el composite no es tan resistente pero nos asegura una esperanza de vida de bastantes años, especialmente si practicamos una rutina de higiene oral completa.
Otra de las posibilidades que existen en la actualidad está en quitar los empastes de amalgama para sustituirlos por composite, una intervención simple y rápida que nos ofrece la posibilidad de mejorar nuestra estética de forma muy sencillo y por ello no nos debe extrañar que cada vez sean más las personas que optan por este proceso.
Finalmente hablaremos del empaste como uno de los procesos más sencillos e indoloros que encontramos dentro del sector de la Odontología, siendo este un tratamiento que consiste en la extracción de la parte cariada del diente y la posterior colocación del composite con la finalidad de devolver tanto la estética como la funcionalidad oral al paciente. Finalmente se debe comprobar si la mordida es correcta para dar por finalizado este proceso que nos permite evitar que la caries acceda hacia el interior del diente, haciendo peligrar la estructura de la pieza dental.
Fuente: http://www.dentaldeal.es/
Hoy por hoy la resina compuesta es la opción más común y habitual en un empaste, mejorando ampliamente las prestaciones que nos propone la amalgama, a pesar de ello no debemos olvidar que el composite no es tan resistente pero nos asegura una esperanza de vida de bastantes años, especialmente si practicamos una rutina de higiene oral completa.
Otra de las posibilidades que existen en la actualidad está en quitar los empastes de amalgama para sustituirlos por composite, una intervención simple y rápida que nos ofrece la posibilidad de mejorar nuestra estética de forma muy sencillo y por ello no nos debe extrañar que cada vez sean más las personas que optan por este proceso.
Finalmente hablaremos del empaste como uno de los procesos más sencillos e indoloros que encontramos dentro del sector de la Odontología, siendo este un tratamiento que consiste en la extracción de la parte cariada del diente y la posterior colocación del composite con la finalidad de devolver tanto la estética como la funcionalidad oral al paciente. Finalmente se debe comprobar si la mordida es correcta para dar por finalizado este proceso que nos permite evitar que la caries acceda hacia el interior del diente, haciendo peligrar la estructura de la pieza dental.
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